jueves, 31 de julio de 2014

[C/P] Zebrating, anamorfosis urbano

Zebrating, anamorfosis urbano



El arte urbano del misterioso dúo alemán Zebrating ha decorado desde 2011 múltiples calles europeas con anamorfosis. A través de simples franjas formadas con pintura roceada, las rejas de distintas ciudades han sido diseñadas por estos dos artistas. Al caminar, los peatones más observadores quienes encuentren las obras de Zebrating podrán apreciar cómo se separan y se vuelven a unir las franjas que componen estas obras de arte. 



Hechas en menos de 30 minutos y listos para huir de la policía, las obras de la mujer y el hombre que conforman este dúo buscan maximizar y darle color a ciertos espacios públicos grises y aburridos. Los trabajos de Zebrating han sido inspirados principalmente por otros artistas callejeros como C215; por el artista holandés Maurits Cornelis Escher (1898 – 1972), el pintor y grabador austriaco Egon Schiele (1890 – 1918) y el pintor simbolista, también austriaco, Gustav Klimt (1862 – 1918).




Hace aproximadamente tres años este dúo comenzó a proponer un street art particular e innovador escondido entre las rejas de calles y avenidas de Mannheim, Berlín y Stuttgart, principalmente. Claramente, su trabajo requiere de una gran capacidad de abstracción como un conocimiento profundo de la perspectiva, ya que cuando las obras son vistas desde la parte delantera, no son realmente visibles; los artistas hacen uso de la trigonometría matemática para saber cómo dividir su obra entre el número de barrotes. Es necesario mirarlas de lado para que se cree la impresión de una única obra de dos dimensiones. Parecido a un cartel publicitario rotativo, la imagen aparece solamente desde cierto ángulo. Mientras se va cambiando el punto de vista, la obra se esconde hasta desaparecer completamente. 

Zebrating se ha presentado en importantes galerías europeas y su obra se ha extendido hacia otras ciudades como París y Londres. 
















Todos pueden ver nuestro trabajo cuando pasen, pero lo hemos diseñado especialmente accesible para las personas que sepan dónde mirar. Para apreciar nuestro arte, uno debe cambiar su punto de vista y dar unos pasos hacia atrás.






Fuente: Cultura Colectiva

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